La temporada de declaración de la Renta 2023-2024 se avecina, y los contribuyentes se sumergen en la vorágine de deducciones, plazos y la determinante pregunta de si deben o no presentar el borrador del IRPF.
A medida que marzo se instala, es crucial entender los umbrales de ingresos que determinan la obligatoriedad de la declaración fiscal.
Obligatoriedad de declarar según rendimientos en 2023
La Agencia Tributaria señala que los contribuyentes deben considerar diversos rendimientos al evaluar la necesidad de presentar la declaración. Ya sean ingresos laborales, de capital mobiliario o inmobiliario, ganancias patrimoniales o actividades económicas, cada fuente de ingresos tiene su papel en esta evaluación.
Mínimos exentos en rendimientos de trabajo con dos pagadores
En el caso específico de los rendimientos de trabajo, que representan la principal fuente de ingresos para muchos, la ley establece mínimos exentos.
Si solo has tenido un pagador, el umbral está en los 22.000 euros. Sin embargo, este panorama cambia para aquellos con dos o más empleadores.
El mínimo exento para dos pagadores en 2024
Para quienes hayan tenido dos o más pagadores a lo largo de 2023, el límite exento se fija en 15.000 euros. Esto implica que si los rendimientos íntegros de trabajo no superan esta cifra, la presentación de la declaración no será obligatoria.
Es esencial tener presente que esta exención aplica siempre y cuando los ingresos del segundo y posteriores pagadores no excedan los 1.500 euros.
Cambios futuros en el mínimo exento para dos pagadores
Es relevante destacar que el presente año marca el último en el que se aplicará este mínimo exento. El Gobierno, en respuesta al aumento del salario mínimo interprofesional (SMI), ha aprobado una elevación del mínimo exento para tributar por el IRPF.
A partir de 2025, este límite se establecerá en 15.876 euros para quienes hayan tenido dos pagadores.
Con la fecha límite de la declaración de la Renta acercándose, comprender los límites de ingresos es crucial. Si bien los mínimos exentos actuales pueden eximir a algunos contribuyentes, es esencial estar al tanto de los cambios proyectados para futuros ejercicios fiscales.
Planificar con anticipación permitirá a los contribuyentes ajustar su estrategia financiera en consecuencia y cumplir con sus obligaciones tributarias de manera eficiente.