La Seguridad Social ofrece la posibilidad de una jubilación anticipada para trabajadores con ciertas enfermedades incapacitantes , permitiendo que algunos puedan retirarse desde los 52 años. Sin embargo, en 2025 entrarán en vigor cambios en la edad de jubilación y en los requisitos para acceder al 100% de la pensión , lo que complicará la posibilidad de jubilación para muchos.
Las modificaciones buscan adaptar el sistema a la realidad demográfica y económica del país, manteniendo un modelo de pensiones dinámico y flexible que responda a las necesidades de cada trabajador. La edad ordinaria de jubilación se situará en 65 años para aquellos con más de 38 años y 3 meses cotizados , mientras que los que no alcancen ese periodo trabajar deberán hasta los 66 años y 8 meses .
Esta reforma implica un desafío para quienes desean jubilarse antes de tiempo y alcanzar el 100% de la pensión contributiva . Sin embargo, ciertos grupos, especialmente aquellos con enfermedades discapacitantes , pueden acceder a jubilaciones anticipadas a partir de los 52 o 56 años, según el grado de discapacidad y las patologías reconocidas en la normativa vigente.
¿Quiénes pueden acceder a la jubilación anticipada por discapacidad?
Para acceder a la jubilación anticipada por discapacidad , es necesario cumplir con una serie de requisitos establecidos en el Real Decreto 370/2023 , que actualiza las disposiciones anteriores del Real Decreto 1851/2009. Todos los trabajadores que coticen bajo cualquier régimen de la Seguridad Social pueden solicitar esta modalidad de jubilación, siempre que se acredite un periodo mínimo de cotización de 15 años , de los cuales al menos 5 años deben corresponder a un grado de discapacidad igual o superior al 45% .
Este grado de discapacidad debe estar motivado por una de las enfermedades recogidas en el ANEXO I del Real Decreto . Entre las patologías reconocidas se encuentran la parálisis cerebral , el síndrome de Down , la fibrosis química y la esclerosis múltiple , entre otras. La lista no es definitiva, y la Seguridad Social ha señalado que puede ampliarse con nuevas patologías en el futuro, adaptándose así a las necesidades de los trabajadores.
¿Cuáles son las enfermedades que permiten la jubilación a los 52 años?
El acceso a la jubilación anticipada a partir de los 52 años depende del grado de discapacidad y de las enfermedades que afectan al trabajador. Las personas con un grado de discapacidad del 65% o superior tienen la posibilidad de retirarse a los 52 años. Entre las enfermedades que dan derecho a este tipo de jubilación, se incluyen:
- Síndrome de Prader-Willi
- Osteogénesis imperfecta
- Esclerosis lateral amiotrófica (ELA)
- Lesión medular traumática
El Real Decreto establece que si el trabajador acredita un grado de discapacidad del 65% y necesita ayuda de una tercera persona para realizar actividades esenciales, se aplican coeficientes reductores que permiten una mayor reducción en la edad de jubilación . Estos coeficientes son del 0,25 y 0,50
¿Cómo se calculan las pensiones de jubilación por discapacidad?
A diferencia de otras modalidades de jubilación anticipada, las derivadas de discapacidad no sufren recortes en las cuantías . Esto significa que los beneficiarios perciben la pensión de jubilación en función del total de años cotizados y de la base reguladora correspondiente, la cual se calcula a partir de los últimos 25 años de cotización.
La base reguladora y los años cotizados son elementos clave para determinar la cantidad de la pensión, asegurando que el trabajador reciba un ingreso proporcional a su vida laboral. Este cálculo permite que, aún con una jubilación anticipada, las personas con discapacidad no vean reducida su pensión, lo que facilita una transición económica más estable para este grupo.
Además, es importante señalar que la jubilación anticipada por discapacidad no impide el acceso a complementos por mínimos cuando la pensión resultante es baja. De esta manera, el sistema de la Seguridad Social busca garantizar un nivel de vida digno a las personas que, debido a su discapacidad, se ven obligadas a abandonar el mercado laboral de manera anticipada.
Perspectivas para 2025: ¿Qué cambios se avecinan?
La reforma de 2025 plantea retos adicionales para la planificación de la jubilación . Con el aumento de la edad ordinaria de jubilación y la revisión de los requisitos de cotización , muchos trabajadores se enfrentarán a un panorama más restrictivo para acceder a la pensión completa . Sin embargo, la flexibilidad para casos de discapacidad sigue siendo un pilar del sistema, adaptándose a las realidades individuales de los trabajadores.
La Seguridad Social destaca que estas modificaciones buscan asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones a largo plazo, en un contexto de envejecimiento poblacional . Sin embargo, los expertos señalan que será fundamental mantener la vigilancia sobre la aplicación de estas normas para evitar que los trabajadores más vulnerables queden desprotegidos.
En resumen, la jubilación anticipada por discapacidad sigue siendo una herramienta fundamental dentro del sistema de Seguridad Social , aunque los cambios legislativos de 2025 obligan a los trabajadores a planificar con mayor antelación ya comprender en detalle los requisitos necesarios . Las personas con enfermedades discapacitantes cuentan con la posibilidad de retirarse antes, sin ver penalizadas sus pensiones, asegurando así una calidad de vida adecuada tras años de contribución al sistema.
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