Conoce las situaciones en la que el SEPE autoriza el cobro del paro incluso si te vas de tu empleo. Conoce tus derechos y cómo aprovechar esta excepción para garantizar tu seguridad financiera.
Entérate de las exenciones del SEPE, que te permiten cobrar la prestación por desempleo incluso si te has ido de tu empleo. Entiende los detalles, protege tus ingresos y accede a esta valiosa información en nuestro análisis especializado.
¿Cuáles son las principales razones por las que los trabajadores consideran dejar su empleo?
La inquietud sobre si es factible cobrar el paro al dejar un empleo de forma voluntaria es una de las preguntas más comunes entre los trabajadores.
En un reciente estudio de InfoJobs, se reveló que el 16 % de los españoles considera la posibilidad de renunciar a su empleo, principalmente motivados por el deseo de obtener un salario más elevado, así como la búsqueda de la reducción del estrés laboral y el aumento de la motivación.
¿Cuál es el veredicto del SEPE?
De acuerdo con la normativa del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), la respuesta a esta interrogante es clara: si el trabajador decide abandonar su empleo de manera voluntaria, no tiene derecho a percibir el paro.
La prestación por desempleo está diseñada para respaldar a aquellos que se encuentran sin empleo debido a la imposibilidad de encontrar trabajo, excluyendo a aquellos que renuncian voluntariamente a su posición. A pesar de esta regla general, existen algunas excepciones que es esencial tener en cuenta.
¿Bajo qué circunstancias el SEPE permite cobrar el paro al renunciar voluntariamente?
La Ley del Estatuto de los Trabajadores contempla situaciones específicas en las que es posible dejar el empleo de forma voluntaria y aún tener derecho a la prestación por desempleo. Estas situaciones son las siguientes:
Cambio sustancial en condiciones laborales: Si las condiciones laborales experimentan cambios significativos que menoscaban la dignidad del trabajador, como modificaciones en la jornada, horario, distribución de trabajo, régimen de trabajo a turnos, salario o funciones.
Movilidad geográfica: Cuando el trabajador se ve obligado a cambiar de residencia debido a una movilidad geográfica.
Incumplimientos graves del empleador: Si se producen retrasos continuados en el pago del salario o si la empresa adeuda dinero al trabajador.
Asimismo, si el empresario incumple de manera grave sus obligaciones, excluyendo casos de fuerza mayor, o no readmite al trabajador tras una sentencia judicial que lo ordene.
En estos casos, el trabajador tiene el derecho de percibir el paro, ya que se considera que la decisión de abandonar el empleo no fue voluntaria, sino que la empresa forzó la situación.
¿Cómo afecta la renuncia voluntaria a la indemnización por despido y al finiquito?
No solo la prestación por desempleo se ve afectada al abandonar voluntariamente el trabajo, sino también la indemnización por despido.
En el caso de renuncia voluntaria, el trabajador no tiene derecho a recibir indemnización, pero sí a cobrar el finiquito. Este incluye los salarios pendientes, las vacaciones no disfrutadas y las comisiones por objetivos.
Aunque la regla general es que la renuncia voluntaria no da derecho al cobro del paro, es esencial conocer las excepciones establecidas por la legislación laboral.
Antes de tomar la decisión de dejar un trabajo, se recomienda asesorarse sobre las condiciones específicas que podrían permitir el acceso a la prestación por desempleo.