Una medida sorprendente afectará a más de 20 millones de trabajadores en España: la implementación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI).
Este nuevo impuesto, diseñado para abordar desafíos en las pensiones, se convertirá en una parte integral de las nóminas a partir de 2024.
Entendiendo el MEI: Un nuevo impuesto en el horizonte
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) se introduce como una alternativa al antiguo Factor de Sostenibilidad, con características contingentes y temporales.
Su propósito principal es contribuir al fondo de pensiones mediante un reparto equitativo del esfuerzo financiero entre generaciones.
La medida surge ante el envejecimiento desigual de la población, el aumento del desempleo y la situación precaria del fondo de reserva de las pensiones.
¿Cómo impacta el MEI en las nóminas?
A diferencia del antiguo Factor de Sostenibilidad, el MEI actúa sobre los ingresos, específicamente las cotizaciones de los trabajadores.
No afecta directamente el monto de las pensiones, pero se aplicará como un nuevo concepto de cotización, reduciendo las nóminas en un 0,6%.
Este descuento afectará tanto a empleados como a autónomos, representando un impacto en la cuota de seguridad social para ambos grupos.
Objetivos y recaudación del MEI
El objetivo principal del MEI es recaudar fondos para cubrir los costos de las futuras pensiones. Se estima que hasta 2032, este nuevo impuesto generará alrededor de 22.000 millones de euros.
Para lograrlo, se descontará un 0,6% del salario de los trabajadores, distribuido con un 0,5% a cargo de los empleadores y el 0,1% restante asumido por los empleados.
Ajustes para garantizar el futuro de las pensiones
En resumen, el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) introduce un nuevo impuesto que transformará las nóminas de más de 20 millones de trabajadores en España a partir de 2024.
Su enfoque en un reparto equitativo del esfuerzo financiero entre generaciones busca asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones en medio de desafíos demográficos y financieros.
Aunque no afecta directamente a las pensiones, este cambio sorpresivo está destinado a tener un impacto significativo en la realidad financiera de los trabajadores españoles.