La pensión de viudedad experimenta un cambio significativo en el año 2024, marcando un hito histórico al equipararse a las pensiones de jubilación.
Esta igualación, derivada de una revalorización del 14,1%, representa un paso adelante en el reconocimiento económico para aquellos que han perdido a sus seres queridos. Analicemos en detalle cómo estas modificaciones beneficiarán a los viudos y divorciados.
Impacto de la revalorización en la pensión de viudedad
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, anunció un aumento del 6,9% en las pensiones mínimas de viudedad, efectivo desde el 1 de enero de 2024.
Este incremento se eleva al 14,1% cuando el beneficiario tiene cargas familiares, una medida especialmente beneficiosa para mujeres dedicadas al cuidado de los hijos.
Ampliación de beneficiarios: Divorciados y parejas de hecho
Una novedad importante es la inclusión de divorciados y parejas de hecho como beneficiarios de la pensión de viudedad, siempre que hayan formad o parte de la vida conyugal con el fallecido. Esta extensión refleja una adaptación a las dinámicas familiares contemporáneas.
Cuantías de la pensión de viudedad en 2024
Las nuevas cuantías de la pensión de viudedad, tras la revalorización, varían según la situación y las cargas familiares. A continuación, se detallan algunos ejemplos:
- Con cargas familiares: La cuantía mensual asciende a 968,40 euros en 14 pagas.
- Con 65 años o discapacidad ≤ 65%: Se reciben 837,14 euros mensuales.
- Entre 60 y 64 años: La pensión es de 783,15 euros al mes.
- Mayores de 60 años: La cuantía mensual es de 634,24 euros.
Límites y complementos para la máxima cuantía
La cuantía máxima alcanza los 3.174 euros al mes o 44.436 euros anuales. Este monto es alcanzable al complementar la viudedad con otra pensión contributiva o si el fallecido cotizó por bases altas en los años previos.
Porcentaje de la base reguladora y condiciones para el beneficio
La persona beneficiaria recibe el 52% de la base reguladora, que varía según la situación laboral del fallecido y la causa de la muerte.
Desde el 1 de agosto de 2008, este porcentaje asciende al 56%, y a partir del 1 de enero de 2019, puede llegar al 60%, aumentando al 70% en casos con cargas familiares y determinados niveles de ingresos.
Este cambio representa un paso adelante en el reconocimiento y apoyo económico a quienes han sufrido la pérdida de sus seres queridos, marcando una nueva era en las pensiones de viudedad en España.